Es momento de volver a pensar en esos más de 100 días caminando por toda España que finalizaron en junio. Al final, como siempre, el toro de lo que era para ayer, me volvió a pillar y durante 4 meses, prácticamente no he tenido tiempo ni de revisar las vivencias de esta aventura. Hoy, con la ayuda (espero), de más compañeros de viaje, retomo este camino que la prisa dejó hace unos meses parado …..
Por muchas razones me puse a caminar en marzo, pero entre las principales, estaba poder dejar constancia de esta aventura a través de algunas de las ideas que la propiciaron: Mi situación personal, la situación de gats, la situación del llamado tercer sector, la situación socioeconómica actual, el convencimiento de que juntos podemos, de que la suma de pequeños esfuerzos compartidos en una buena dirección tiene un potencial de transformación enorme y sobre todo , el camino entorno a ese otro mundo posible del que tanto hablamos o que tanto anhelamos.
Para mi, hablar de ese otro mundo posible, siempre me tele transporta a Chiapas, ya que automáticamente me viene a la cabeza la idea de ese mundo dónde quepan muchos mundos. Para hablar de otro mundo, deberíamos ser capaces de pensar en las claves diferenciales que lo harían mejor que el presente y aquí, es dónde esta idea Zapatista de mundo, me parece tan interesante:
“El mundo que queremos es uno donde quepan muchos mundos. La Patria que construimos es una donde quepan todos los pueblos y sus lenguas, que todos los pasos la caminen, que todos la rían, que la amanezcan todos…”
Seguramente no haya nada mejor que hacer, que trabajar por ese mundo donde quepan muchos mundos, y me he propuesto seguir caminando para que no haya nada mejor para mi, que seguir caminando por ese otro mundo del que durante 100 días de ruta tuve la oportunidad de ir conociendo algunas ideas para ir construyéndolo entre todos.
A ver como me salgo….
